Querido Padre Celestial,

Alabanza

Qué increíble es que Jesús, en Su camino a la cruz, se paró para dar la vista al ciego Bartimeo. Aun cuando se acercaba al Calvario, Él todavía extendía Su mano de amor a todos los que Lo necesitaban. Te alabo hoy porque tienes compasión de todos los que están perdidos en las tinieblas. Gracias por abrir mis ojos que alguna vez estuvieron cegados por mi pecado. ¡Toda la alabanza y toda la gloria sean para Ti, el Redentor de la raza humana!

Hoy en Tu Palabra

Apenas Jesús había dicho por tercera vez a Sus discípulos que muy pronto iba a morir cuando Jacobo y Juan ya estaban conspirando junto con su madre para reclamar las posiciones más poderosas del Reino. ¡Qué fácil es estar absorto en pensamientos de importancia personal cuando en realidad necesitamos concentrarnos en servir a los demás! La reprensión que dio Jesús a Sus discípulos me recuerda que necesito seguir el ejemplo de Tu Hijo. Él no vino, “para ser servido, sino para servir y para dar Su vida en rescate por muchos” (Mt 20:28). La historia de Zaqueo me fascina porque contrasta marcadamente con la del joven rico. Jesús le mandó al rico que vendiera “lo que posees” mientras que Zaqueo solo tenía que vender la mitad de sus posesiones. Jesús le dijo al joven: “ven y sé Mi discípulo” mientras que permitió que Zaqueo se quedara en Jericó. Jesús les dijo a Sus discípulos: “¡En verdad les digo que es difícil que un rico entre en el reino de los cielos!” pero Zaqueo, que era “rico”, entró fácilmente. Ambos hombres tomaron la iniciativa para hablar con Jesús, pero uno se fue muy triste y el otro se llenó de gozo. ¿Por qué? ¿Cuál era la diferencia? Hay algunas que destacan: (1) Zaqueo reconocía claramente su necesidad, mientras que el joven rico se centraba en sus buenas obras, (2) Zaqueo admitió francamente sus pecados, mientras que el joven rico proclamó su justicia, (3) Zaqueo lamentaba lo que había hecho y se arrepintió e hizo restitución, mientras que el joven rico solo se fue triste y se auto compadeció, (4) Zaqueo libremente dio su riquezas a los pobres, mientras que el joven rico guardó sus riquezas para sí mismo, (5) Zaqueo Te amó más que a su dinero, mientras que el joven rico amó su dinero más que a Ti. ¡Qué contraste! Zaqueo, más que muchos otros en el Nuevo Testamento, mostró la clase de actitud que deseas ver en los corazones de Tus hijos. Si quiero que me des la bienvenida a Tu Reino, ¡debo imitar la fe sencilla y el amor de Zaqueo!

Reflexión

La parábola que Jesús dijo sobre el noble y sus diez esclavos me enseña que me has encomendado una variedad de dones, talentos y habilidades, y esperas que yo los use en servicio a Ti. ¿Soy diligente y trabajador al usar esos dones? ¿Trabajo duro cada día para aumentar y ampliar Tu Reino?

Petición

Padre, ayúdame a ser como los siervos fieles que trajeron ganancias a Tu Reino. Aunque no sea tan talentoso ni tan dotado como los demás, yo puedo usar lo que me has dado para traerte honra y gloria.

Agradecimiento

Gracias por decirme cómo María ungió a Jesús en Betania. Esto me muestra que a Ti Te importa cada acción de adoración o de servicio y la aprecias. De verdad, el hecho sencillo de amor de María ha sido predicado por todo el mundo para memoria suya, ¡y ella me inspira para que yo Te ame más a Ti!

En el nombre de Jesucristo, Amén.

Versículo de Meditación: Lucas 18:42.