Querido Padre Celestial, Alabanza Te alabo hoy por ser un Dios que me invita a tu presencia. Me dijiste que debo “acercar(me) con confianza al trono de la gracia para que reciba misericordia, y halle gracia para la ayuda oportuna” (He 4:16). También te alabo por ser el Dios de los vivos; tienes todo poder sobre la muerte y el sepulcro (Mt 22:32). Job preguntó: “Si el hombre muere, ¿volverá a vivir?” (Job 14:14). La respuesta es una resonante “Sí”, ¡porque has vencido la muerte! Pablo dijo que “el mismo que resucitó a Cristo Jesús de entre los muertos, también dará vida a sus cuerpos mortales por medio de Su Espíritu que habita en ustedes” (Ro 8:11). Hoy en Tu Palabra Hoy me dijiste cómo el tercer amigo de Job, Zofar, estaba de acuerdo con Bildad y Elifaz (¡ninguno de sus amigos creían en la inocencia en Job!). Para Zofar, el hecho que Job afirmaba ser inocente demostró que Job era pecaminoso. Zofar severamente le echó un sermón a Job y le advirtió que tú no lo habías castigado tanto como merecía (Job 11:6). Job rechazó sarcásticamente la “sabiduría” de sus amigos (Job 12:2), diciendo que tú no te comportas en cada momento de maneras predecibles (Job 12:13–25). Entonces Job siguió hablando contigo, pidiendo la oportunidad para defenderse ante los tribunales (Job 13:20–22). Él concluyó con una reflexión grave sobre la muerte y lo que pasa después de la muerte; trató de imaginar la vida después de la muerte (Job 14:13–15), pero su esperanza se fue volando con rapidez y la desesperación regresó (Job 14:18–22). Reflexión Con demasiada frecuencia trato de vivir la vida cristiana de mi propia fuerza. Debo recordar, como dijo Job, que en ti hay la sabiduría y el poder, y el consejo y el entendimiento son tuyos (Job 12:13). Debo echar toda mi ansiedad sobre ti en vez de tratar de resolver mis problemas sin ayuda ninguna (v. 1 P 5:7). Petición Padre, ayúdame a vivir teniendo la eternidad en cuenta; sí que hay vida después de la muerte. Habrá una resurrección de ambos justos e impíos (Hch 24:15), la una para la vida eterna y la otra para la muerte eterna en el infierno (Dn 12:2). Denme tu gracia para que yo persevere hasta el fin. Agradecimiento ¡Gracias por la esperanza viva que tengo por la resurrección de Jesucristo de los muertos! En el nombre de Jesucristo, Amén. Versículo de Meditación: Job 14:14. |