|
Querido Padre Celestial, Alabanza Doblo las rodillas en adoración ante ti, el Rey Supremo del universo. Eres omnipotente; otros seres más poderosos que yo doblan las rodillas ante ti, y se someten a tu autoridad. Te alabo por ser un Dios digno de mi amor, devoción, temor y servicio. Te alegras de mi amor, y deseas enseñar y afinar a mí. Te alabo por ser Dios que quiere ser amado y adorado por quién eres, no sólo por lo que nos das. Hoy en Tu Palabra Hoy me dijiste sobre un hombre llamado Job. Job vivió una vida intachable ante ti; esto me enseña que yo también puedo vivir una vida santa. Satanás no podría tocar ni un pelo de Job sin tu permiso; esto me muestra que estoy protegido todo el tiempo de los ataques del enemigo. Job te adoró incluso después de haber perdido todo, incluso a sus hijos; esto me enseña que todo lo que tengo es una dádiva de ti y no soy más que un administrador de tus posesiones. Job fue golpeado por una terrible enfermedad, pero todavía no te maldijo por su sufrimiento; esto me enseña que debo aceptar lo malo tanto como lo bueno y esperar con paciencia por tu misericordia y compasión (Stg 5:11). Reflexión Job demostró una tremenda preocupación por el bienestar espiritual de sus hijos. ¿Estoy tomando el tiempo diariamente para orar por mi familia y ayudarle a crecer espiritualmente? Petición Padre, ayúdame a vivir una vida santa y mantener mi enfoque en ti y tu gracia. Te pido que hagas una valla alrededor de mi vida; frustra los planes del enemigo para robar, matar y destruir a mí (Jn 10:10). Agradecimiento Me has dado abundantemente todas las cosas para que yo las disfrute (1 Ti 6:17). Gracias por tu provisión. Aun si lo que “temo viene sobre mí”, como experimentó Job, te daré gracias por tu presencia constante y tu cuidado en mi vida (Job 3:25). En el nombre de Jesucristo, Amén. Versículo de Meditación: Job 1:9. |