Querido Padre Celestial,

Alabanza

Nehemías y el remanente vencieron su miedo recordando que Tú eres “grande y temible” y de que Tú “peleará[s] por nosotros” (Neh 4:14, 20). Te alabo hoy como el Dios que tienes las circunstancias de mi vida bajo Tu control. Conoces bien todas las amenazas y los peligros, y eres sumamente capaz de cubrir todas mis necesidades. ¡Toda la alabanza sea para Ti, el Señor de los ejércitos! ¡Aleluya!

Hoy en Tu Palabra

Hoy me dijiste sobre la oposición que Nehemías y el remanente enfrentaron mientras trabajaban para reedificar las murallas de Jerusalén. Sanbalat, Tobías y Guésem utilizaron todo tipo de trucos para estorbar las reparaciones. Primero, se burlaron de su trabajo: “Aun lo que están edificando, si un zorro saltara sobre ello, ¡derribaría su muralla de piedra!” (Neh 4:3b) Nehemías respondió con oración a Ti, pidiéndote que “devuelve su oprobio sobre sus cabezas”. Esto me enseña que debo dejarte a Ti la venganza y que tengo que rechazar la mala opinión que el mundo tiene de mi servicio para Ti. Entonces, ellos amenazaron al remanente con violencia. Nehemías respondió pidiendo Tu ayuda, y estableció una guardia de 24 horas para proteger a los trabajadores. Esto me muestra cómo evitar el pánico y la parálisis. Debo echar sobre Ti toda mi ansiedad, y después tomar las decisiones apropiadas para tratar con mi situación. La próxima dificultad no surgió de sus enemigos sino de adentro—muchos de los del pueblo habían sido deshechos por el temor. Nehemías respondió animándolos: “Acuérdense del Señor, que es grande y temible, y luchen por sus hermanos, sus hijos, sus hijas, sus mujeres y sus casas” (Neh 4:14). Esto me enseña cómo animarme a mí mismo y a otros en el Señor. Debo meditar sobre quién eres, y entonces debo actuar sabiendo que estás conmigo. El remanente lo escuchó, y siguiendo el mandato de Nehemías, trabajaron con sus armas a su lado. Algunos días después, Nehemías se enteró de la presencia de pecado en el pueblo. Ciertas personas del remanente habían cobrado en exceso a sus hermanos judíos, y había resultado en esclavitud para algunos de los pobres. Nehemías respondió exponiendo el pecado, reprochando a los pecadores, y llamándolos a que regresaran a vivir según la ley de Dios. También se sacrificó personalmente para dejar un buen ejemplo para el pueblo. Esta historia me da un modelo que puedo seguir al tratar con el pecado en la iglesia, y me dice que habrán tiempos cuando necesitaré sacrificar algo para ser un buen lider. Sanbalat y sus compañeros se dieron cuenta de que se acercaba la terminación del trabajo, e intrigaron para eliminar a Nehemías (y si eso no fuera posible) o desacreditarlo. Nehemías respondió con sabiduría, prudencia e integridad, y las murallas y las puertas fueron terminadas. Esto me enseña que debo ejercer el juicio sabio al tratar con los malvados. Debo mantener mi integridad y seguir Tus mandatos incluso cuando los que están alrededor de mí estén presionándome (Neh 6:13–14).

Reflexión

Semaías intentó hacer que Nehemías pecara al sugerirle que se escondiera en el templo, un edificio solo para el uso de los sacerdotes. En su sabiduría, Nehemías reconoció que era traición, porque cuando un profeta ofrece consejo que no está de acuerdo con Tu Palabra, se revela como un lobo con vestidos de oveja.

Petición

Padre, imprime las lecciones de la lectura de hoy en mi corazón. Ayúdame a poner en práctica esta sabiduría y actuar con la misma determinación y el mismo compromiso que Nehemías demostró.

Agradecimiento

¡Gracias por mostrarme que es posible pasar seguros por las dificultades confiando en Ti!

En el nombre de Jesucristo, Amén.

Versículo de Meditación: Nehemías 5:19.